martes, 17 de noviembre de 2009

Memorias de grupo del dia 13 de Noviembre

Durante esta semana David a leído y resumido el libro de J. Carlos Vizuete Mendoza ``La iglesia en la edad moderna´´. Incluyo un breve resumen de dicha obra realizado por él

Resumen

-La Iglesia en la Edad Moderna:

Autor: J.Carlos Vizuete Mendoza

Los temas que he buscado en este libro son, la Reforma, la Contrarreforma y la Iglesia en la época del absolutismo.

En lo referente al tema de la Reforma y Contrarreforma nos cuenta el nuevo modelo tomado por la Iglesia tras el Concilio para acabar con los focos del protestantismo, como la nueva política tomada para con el papel de los clérigos como confesores, expiando y desde los altares hablando en contra de ello.

También de las reformas de antiguas ordenes.

Por último a la cuestión de los ritos, debido a que los primero misioneros no daban mucha importancia a la forma de realizarlos en las poblaciones, aquí se asentaron ya los patrones para su misma realización en todo el mundo.

Sobre el capítulo de la Iglesia en la época del absolutismo, nos interesan dos temas, las conveniencias religiosas de la paz de Westfalia debido al problema que llevo, de la Guerra de los 30 años y para asentar las barreras del cristianismo y protestantismo.


Jorge por su parte esta trabajando en el texto de Alfredo Alvar Ezquerra titulado ``La economia europea en el S.XVI´´ y compartio con el grupo sus dudas acerca de los temas que se inmiscullen en la parte del trabajo de otros compañeros, solucionada la discusion por parte del profesor continuamos el trabajo.

Abhay trabaja en la ``Historia de la vida privada.el proceso de cambio en la sociedad de S.XVI al XVII´´ y en ``Agricultura y crecimiento economico en la Europa occidental modern´´ de Manuel Ardit Lucas tambien. Ademas a escrito un resumen acerca de la Economia y la sociedad en la europa del siglo XV basandose en diferentes libros.


Economía y sociedad en la Europa del S.XV

Crecimiento demográfico y económico:

Europa inicio en el S.XV una recuperación económica y demográfica y supero la grave crisis de finales de la Edad Media. Se produjo un alza continuada de la población a causa de la desaparición de las grandes epidemias, de una época de relativa estabilidad política y de la reactivación del comercio.

Las rutas marítimas del mediterráneo Occidental y oriental, del mar Báltico y del mar del Norte volvieron a retomar su actividad.

Se abrió una nueva ruta en el Atlántico africano y se reactivo la ruta terrestre que comunicaba Italia con el sur de Alemania y los países del Rin.

El desarrollo del comercio tuvo consecuencias del aumento de la producción artesana y el crecimiento de las ciudades que eran centros comerciales o importantes puertos ( Génova, Venecia Lisboa, Brujas, Londres o Hamburgo)

Este comercio fomentó además la explotación de las minas de plata en la Europa Central y la búsqueda de una ruta marítima hasta el oro de Sudán.

Nobles, campesinos y burgueses:

A pesar de los cambios la sociedad europea poco cambio, continuo siendo una sociedad rural y estamental. Al igual que en la Edad media continuo siendo una sociedad muy dividida entre clases privilegiadas y no privilegiadas.

Por un lado la nobleza y la alta jerarquía de la Iglesia que gozaba de riquezas, honores y cargos y que además estaban exentos de pagar impuestos. A pesar de que con el tiempo fueron perdiendo privilegios y poder políticos, mantuvieron su poder económico y la mayoría de las tierras.

Por otro lado se encontraba el resto de la población formada en su mayoría por campesinos, sometidos al poder nobiliario. Estos se dedicaban la mayoría a la agricultura de bajo rendimiento. Tenían una economía de supervivencia y solo ocasionalmente acudían a ferias y mercados.

El crecimiento de la actividad económica tuvo como consecuencia la acumulación de riquezas en manos de la burguesía (comerciantes y mercaderes)

Este grupo que ya era importante durante la Baja Edad Media consolido su poder y su riqueza y empezó a invertir sus beneficios en la explotación de tierras, en la compra de fincas urbanas y en el préstamo de dinero a nobles y monarcas. Con esto se origino un poderoso grupo social, la burguesía capitalista, cuya fuerza e influencia, incluso política, no se centraba en la propiedad de tierras, sino en la acumulación de capital.


Memoria de grupo realizada por Cristian Reyes Robledo



lunes, 16 de noviembre de 2009

Economia en la edad moderna II. Apuntes de los dias 13 y 14 de Noviembre

Letras de cambio: Son un instrumento financiero que funciona hasta en la actualidad aunque en las ultimas décadas a caído en desuso. Permite movimientos de dinero sin necesidad de manejar cantidades de oro o plata.Es una orden escrita de una persona (dador) a otra (tomador) para que pague una determinada cantidad de dinero en un tiempo futuro (determinado o determinable) a un tercero (librado). Las personas que intervienen son: El Girador o dador: Da la orden de pago y elabora el documento. El Tomador: Acepta la orden de pago firmando el documento comprometiendose a pagar. Por lo tanto responsabilizándose, indicando en el mismo, el lugar o domicilio de pago para que el acreedor haga efectivo su cobro. El Beneficiario o librado: Recibe la suma de dinero en el tiempo señalado. Entre el Tomador y el Beneficiario podía haber cualquier numero de intermediarios que salvaban la distancia u otras complicaciones que hubiera entre ambos. Tanto el Tomador como los intermediarios recibían un porcentaje del pago cuando entregaban al Dador la confirmación del pago. Este sistema permitia el fenómeno del endoso, por el cual se podía reutilizar una letra de cambio para pagar otra operación sin necesidad de cambiarla por efectivo.


Deuda Publica
:
Por deuda pública se entiende al conjunto de deudas que mantiene un Estado frente a los particulares u otro país. Constituye una forma de obtener recursos financieros por el estado o cualquier poder público materializada normalmente mediante emisiones de títulos de valores. Es además un instrumento que usan los Estados para resolver el problema de la falta puntual de dinero. Existen dos tipos de deuda publica, deuda flotante con alto interés y a corto plazo. La deuda consolidada, en forma de bonos del tesoro o letras, mas diferida en el tiempo y a mas bajo interés.

Los juros son la primera versión de la deuda publica en la Corona de Castilla. Conocidos desde el siglo XIII, su colocación a cambio de numerario no se inició hasta el XIV. Hay tres clases de juros: vitalicios, perpetuos y al quitar, estos dos últimos idénticos en la práctica, puesto que nunca se amortizaban los juros al quitar. Los vitalicios se cancelaban sin amortización, habitualmente al cabo de dos vidas, por lo que su interés era superior (12,5 y 14,3%).

Al no haber unidad de tesorería, la deuda seguía de modo inmediato a la renta mediante la fórmula del situado, por el que se concedía al titular el derecho a recibir sus intereses sobre una contribución y un lugar determinado. La diferencia de previsión de cobro de cada renta o lugar explica el interés por mudar, o sea trasladar la situación de la deuda de rentas de menor garantía a rentas de previsible mayor garantía.

Tras la famosa quiebra de Felípe II a la muerte de su padre Carlos V, con la suspensión del pago de los asientos (17 de abril de 1557), el arreglo de la deuda procedente de los asientos impagados se pudo llevar a cabo recurriendo a la creación masiva de juros. Las Cortes de Toledo de 1559-1560 lograron la constitución de una junta de medios que elaboró un estudio sobre el valor de rentas y situados, con vistas a su consolidación. El total debía acercarse a 10.000 millones de maravedis, y la masa anual de intereses superaba los 550 millones. La deuda flotante y los atrasos suponían 1.950 millones. El decreto de 14 de noviembre de 1560 consolidó el sistema al pagar a los asentistas con juros al 5%, que se elevaban al 7,1% en el caso de los mercaderes y particulares perjudicados por el secuestro de las partidas procedentes de América. La inseguridad del sistema, dependiente de tales rentas de percepción irregular, parece un precedente de otras situaciones posteriores, como el caso de Law en la Francia de comienzos del siglo XVIII.

Los juros tuvieron una prolongada vida que permitió con muchos altibajos mantener la Hacienda de la Monarquía Hispánica hasta el final del Antiguo Régimen. El primer tercio del siglo XIX, con la Guerra de Independencia, la Independencia Americana y la Guerra Carlista hundieron definitivamente el crédito público que sólo pudo recuperarse con la Desamortización.

En relación con esto se irán creando instituciones bancarias que por ejemplo en el norte de Italia tomaron la forma de Montes de piedad, los antecesores de las cajas de ahorro.

Los Montes de Piedad atendían las demandas de las clases sociales más necesitadas de protección, a través de la concesión de préstamos gratuitos sin interés, garantizados con alhajas y ropas, e intentando con ello suavizar los abusos de la usura. Para conseguir su finalidad, el Monte de Piedad necesitaba recursos, que obtenía sobre todo de la captación de depósitos en metálico. También obtenía fondos provenientes de limosnas, de ayudas de la Corona y de celebraciones religiosas. Con ello se formaba un fondo común.


Evolución de la economía en las diferentes épocas de la Edad Moderna:

-Desarrollo de la economía es las diferentes épocas de la Edad moderna

-Nuevos instrumentos financieros

-Aumento de la actividad comercial

-Desarrollo industrial

-Ferias y mercados

-Aumento de los prestamos bancarios

En el Siglo XVII existe una crisis económica y demográfica que se presta a distintas interpretaciones:
-Roland Émile Mousnier mantenía la teoría de que en este siglo se dio una crisis a todos los niveles del ser humano.
-Eric Hobsbawm trato la crisis económica que según su interpretación produjo el cambio del feudalismo al capitalismo
-Hugh Trevor-Roper diserto acerca de la crisis social causada por las relaciones entre Estado y Sociedad, entre corte y país

La agricultura, que sigue siendo la principal actividad de la mayoría de la población, ve llegar también algunos cambios. El cultivo de los vegetales americanos y el desarrollo del mercado de flores (sobre todo en Holanda), con el mercado de tulipanes se desarrollo una de las primeras burbujas financieras.
En cuanto a la industria de este siglo cabe destacar las industrias de lujo: violines,encajes,tabaco,licores etc...

En el Siglo XVIII se registran algunos cambios importantes en todos los ámbitos de la economía.

-Agricultura:
  • Crecimiento de la población.
  • Aumento de las zonas cultivables.
  • Roturación de las tierras comunales.
  • Interés por mejorar el rendimiento ( existencia de tratados agronómicos en Francia, Alemania e Inglaterra)
-Industria:
  • Tradicional y manufacturera en buena parte del siglo
  • Desarrollo de las industria de la construccion de la textil (algodón) la metalúrgica y la minera.
  • El carbón fuente de energía de la primera revolución industrial.
  • Revolución industrial textil en Inglaterra ( maquinas de tejer)
-Comercio y finanzas:
  • Consolidación del comercio oceánico
  • Dominio Inglés sobre dicho comercio
  • Revolución financiera en Gran Bretaña, importancia del papel de la deuda publica que a diferencia de su contrapartida en castilla estaba apoyada y garantizada por el parlamento lo que implicaba la obligatoriedad del pago y el respeto del las clausulas firmadas.
Doctrinas económicas:

Mercantilismo: Es una doctrina económica que mide la riqueza de un país por la cantidad de oro y plata que acumula. En España se impone a la escolástica imperante anteriormente. El estado interviene con los siguientes proyectos mercantilistas:
  1. Trata de favorecer a la producción de los territorios propios, proteccionismo (El proteccionismo es el desarrollo de una política económica en la que, para proteger los productos del propio país, se imponen limitaciones a la entrada de similares o iguales productos extranjeros mediante la imposición de aranceles e impuestos a la importación que encarezcan el producto de tal suerte que no sea rentable.) y autarquía (Sistema económico según el cual una nación debe ser capaz de abastecerse a sí misma y subvenir a todas sus necesidades con un mínimo de intercambios comerciales con el exterior y rechazando los capitales extranjeros. Es sinónimo de economía cerrada al comercio exterior o al mercado global, lo que conlleva establecer restricciones al intercambio entre individuos de distintos sitios.)
  2. Desde el tercer cuarto del S.XVIII intento de promover y financiar desde el estado a empresas manufactureras.
  3. Los estados coloniales intentaran perpetuar el monopolio comercial

Casi todos los economistas europeos de entre 1500 y 1750 se consideran hoy en día como mercantilistas. Sin embargo, estos autores no se veían a sí mismos como partícipes de una sola ideología económica, sino que el término fue acuñado por Victor Riquetti, Marqués de Mirabeau en 1763, y fue popularizado por Adam Smith en 1776. De hecho, Adam Smith fue la primera persona en organizar formalmente muchas de las contribuciones de los mercantilistas en su libro La Riqueza de las Naciones. La palabra procede de la palabra latina mercari, que tiene el sentido igual al castellano mercantil, en el sentido de llevar a cabo un negocio, y que procede de la raíz merx que significa mercancía. Fue utilizada inicialmente sólo por los críticos a esta teoría, tales como Mirabeau y Smith, pero pronto fue adoptada por los historiadores. El mercantilismo en sí no puede ser considerado como una teoría unificada de economía. En realidad no hubo escritores mercantilistas que presentasen un esquema general de lo que sería una economía ideal, tal y como Adam Smith haría más adelante para la economía clásica. En su lugar, el escritor mercantilista tendía a enfocar su atención en un área específica de la economía. Sería después del periodo mercantilista cuando los estudiosos que vinieron posteriormente integrasen las diversas ideas en lo que llamarían mercantilismo, como por ejemplo Eli F. Heckscher que ve en los escritos de la época a la vez un sistema de poder político, un sistema de reglamentación de la actividad económica, un sistema proteccionista y también un sistema monetario con la teoría de la balanza comercial. Sin embargo, algunos teóricos rechazan completamente la idea misma de una teoría mercantilista, argumentando que da "una falsa unidad a hechos dispares". El historiador del pensamiento económico Mark Blaug hace notar que el mercantilismo fue calificado con el paso del tiempo como "molesto equipaje", "diversión de historiografía", y de "gigantesco globo teórico". Hasta cierto punto, la doctrina mercantilista en sí misma hacía imposible que existiese una teoría general económica. Los mercantilistas veían el sistema económico como un juego de suma cero, en donde la ganancia de una de las partes suponía la pérdida de otra, o siguiendo la famosa máxima de Jean Bodin "no hay nada que alguien gane que otro no pierda" (Los Seis libros de la República). Por tanto, cualquier sistema de políticas que beneficiasen a un grupo por definición también harían daño a otro u otros, y no existía la posibilidad de que la economía fuese empleada para maximizar la riqueza común, o el bien común. Parece que los escritos de los mercantilistas se hubieran hecho para justificar a posteriori una serie de prácticas, más que para evaluar su impacto y determinar así el mejor modo de llevarlas a término.


Las ideas mercantilistas fueron la ideología económica dominante en toda Europa al principio de la Edad Moderna. Sin embargo, como conjunto de ideas no sistematizadas, su aplicación concreta difirió en la práctica de cada país.

En Francia, el mercantilismo nace a principios del Siglo XVI, poco tiempo después del reforzamiento de la monarquía. En 1539, un real decreto prohíbe la importación de mercancías textiles de lana provenientes de España y de una parte de Flandes. El año siguiente se imponen restricciones a la exportación de oro. Se multiplican las medidas proteccionistas a lo largo del siglo. Jean-Baptiste Colbert, ministro de finanzas durante 22 años, fue el principal impulsor de las ideas mercantilistas en Francia, lo que hizo que algunos hablaran de colbertismo para designar el mercantilismo francés. Con Colbert, el gobierno francés se implicó mucho en la economía para acrecentar las exportaciones. Colbert eliminó los obstáculos al comercio al reducir las tasas aduaneras interiores y al construir una importante red de carreteras y canales. Las políticas desarrolladas por Colbert en conjunto resultaron eficaces, y permitieron que la industria y la economía francesas crecieran considerablemente durante ese periodo, convirtiendo a Francia en una de las mayores potencias europeas. No tuvo tanto éxito a la hora de convertir Francia en una gran potencia comercial equiparable a Inglaterra y a Holanda. También es característico del colbertismo emprender una decidida política de creación de Manufacturas Reales que fabricaban productos estratégicos o de lujo (los Gobelinos, para tapices y cristales), en ambos casos consumibles en primer lugar por la demanda de la propia monarquía, al tiempo que producían la emulación de su consumo tanto dentro como fuera del reino. Dicha emulación también se vio en la creación de manufacturas similares en otros países europeos, entre los que destacaron las Reales Fábricas españolas de productos de lujo (Porcelana del Buen Retiro, Cristal de la Granja, Real Fábrica de Tapices), de armas (Real Fábrica de Artillería de La Cavada), y de artículos de gran consumo que se monopolizaban por el estado como regalías: tabaco (la Real Fábrica de Tabacos de Sevilla y la de Madrid), aguardiente, naipes.

En Inglaterra, el mercantilismo alcanza su apogeo durante el periodo llamado del Long Parliament (1640–1660). Las políticas mercantilistas también se aplicaron durante los periodos Tudor y Estuardo, especialmente con Robert Walpole como principal partidario. El control del gobierno sobre la economía doméstica era menor que en el resto de Europa, debido a la tradición de la Common law y el progresivo poder del parlamento.[26] Los monopolios controlados por el estado se habían extendido, especialmente antes de la primera revolución inglesa, a pesar de que a menudo eran cuestionados. Los autores mercantilistas ingleses estaban divididos acerca de la necesidad de control de la economía interior. El mercantilismo inglés adoptó sobre todo forma de control del comercio internacional. Se puso en marcha un amplio abanico de medidas destinadas a favorecer la exportación y penalizar la importación. Se instauraron tasas aduaneras sobre las importaciones y subvenciones a la exportación. Se prohibió la exportación de algunas materias primas. Las Navigation Acts (Actas de Navegación) prohibían a los comerciantes extranjeros hacer comercio interior en Inglaterra. Inglaterra aumentó el número de colonias y, una vez estaban bajo control, se instauraban reglas para autorizar a producir sólo materias primas y a comerciar únicamente con Inglaterra. Esto condujo a progresivas tensiones con los habitantes de esas colonias y fue una de las principales causas de la Guerra de Independencia de los Estados Unidos. Estas políticas contribuyeron en gran medida a que Inglaterra se convirtiera en la mayor potencia comercial del mundo, y una potencia económica internacional. En el interior, la transformación de tierras no cultivadas en terreno agrícola tuvo un efecto duradero. Los mercantilistas pensaban que para hacer crecer el poderío de una nación, todas las tierras y recursos debían utilizarse al máximo, lo que les llevó a embarcarse en grandes proyectos como el drenaje de la región de los fens ("pantanos" de la llanura de Bedford)

En España tuvo su origen la revolución de los precios que afectó a toda Europa desde el siglo XVI, debido a la llegada a España de las remesas anuales de metales preciosos que traía la flota de Indias, con lo que la reflexión sobre sus causas y posibles soluciones produjo el primer pensamiento económico digno de tal nombre. A ello se sumaba la tradición de peticiones de orden económico en las Cortes, tanto las castellanas como las de los reinos de la Corona de Aragón. Castilla, desde la Baja Edad Media había presenciado un enfrentamiento entre los intereses vinculados a la exportación de la lana (la aristocrática Mesta, y la alta burguesía de mercaderes de Burgos, las ferias y puertos conectados con Flandes) y los vinculados a la producción interna de paños (la baja burguesía y el patriciado urbano de las ciudades centrales, como Segovia y Toledo), que se expresaron en las guerras civiles de los Trastamara e incluso la de las Comunidades. Ese modelo simplificado no oculta la confluencia de multitud de otros intereses, tanto personales como dinásticos, institucionales y estamentales, como los de las distintas partes del clero, e incluso la presencia de minorías como judíos y conversos y la gran mayoría social que es el campesinado. La misma construcción de la monarquía autoritaria tiene mucho que ver con su habilidad para arbitrar estos conflictos socioeconómicos y su dimensión política. La misma organización del monopolio del comercio americano, a través de la Casa de Contratación de Sevilla, conjugado con los préstamos adelantados por banqueros alemanes (familia Fugger) o genoveses, y los mecanismos de la deuda pública (juros) dan una muestra de lo necesario y a la vez complicado que era entender los fenómenos económicos y actuar políticamente sobre ellos. Era vital para el funcionamiento del complejo aparato militar, burocrático y hacendístico de la Monarquía Hispánica (véase Instituciones españolas del Antiguo Régimen), en el que los impuestos (unos del rey, otros del reino, otros de los municipios), las múltiples exenciones, y los derechos y regalías del monarca formaban un entramado caótico.
A los economistas españoles, de abundante nómina en los siglos XVI y XVII (Tomás de Mercado, Sancho de Moncada y Martín de Azpilicueta, teólogos vinculados a la Escuela de Salamanca; Luis Ortiz, contador de hacienda, Martín González de Cellorigo, abogado en la Chancillería de Valladolid, Pedro Fernández de Navarrete, militar y gobernador de Guipúzcoa, Luis Valle de la Cerda, que propone en 1600 la creación de los Montes de Piedad con el apoyo de las Cortes...), se les daba el nombre de arbitristas, por ser arbitrio el nombre que solía darse a la medida que, por su mera voluntad, podía el rey tomar en beneficio del reino, y que esos autores solicitaban. Su papel fue subvalorado por la misma historiografía económica española en sus primeros estudiosos, como es el caso de Manuel Colmeiro.

No todos los autores de la epoca fueron mercantilistas, algunos defendieron la libertad de comercio pero fueron los menos.



Esta entrada ha sido realizada por Cristian Reyes Robledo